AOVE Farga Milenaria
patrimonio milenario del Mediterráneo
El aceite Farga Milenaria, elaborado exclusivamente con aceitunas de olivos que superan los mil años de edad, alcanza un valor que trasciende su ya excelsa calidad gastronómica.
Un regalo y un milagro
Saborea más de mil años de historia
Piénsalo bien: ¿cuántos alimentos conoces que provengan de seres vivos tan antiguos? Los olivos milenarios del Territorio Sénia son una proeza de longevidad, y el hecho de que la gran mayoría sigan dando fruto es un regalo (y un milagro) de la naturaleza.
Más allá de una calidad suprema fuera de toda duda, los aceites de oliva virgen extra con sello Farga Milenaria concentran más de mil años de historia mediterránea, de sabiduría agrícola transmitida generación tras generación, de manos que han cuidado estos gigantes milenarios con devoción y respeto. Es aceite, sí, pero también es memoria viva, patrimonio líquido, esencia de un territorio sin igual.
Perfil sensorial
Un descubrimiento único y memorable
Degustar el aceite Farga Milenaria es una experiencia memorable. De color verde dorado, en nariz tiene un aroma afrutado de intensidad media-alta que evoca la hierba recién cortada, con notas frescas y vegetales que transportan directamente al campo mediterráneo.
En boca, el equilibrio es su sello distintivo: el picante y el dulce se compensan armoniosamente, con un amargo ligero y una astringencia muy baja que lo hacen accesible incluso para quienes se inician en la cata de aceites de alta gama. Es un aceite con carácter pero sin agresividad, complejo pero amable, potente pero elegante.
Catar un Farga Milenaria no es solo degustar un aceite: es un descubrimiento sensorial que te conecta directamente con la esencia más pura del Mediterráneo.
Calidad certificada, origen garantizado
Para asegurar que cada botella de Farga Milenaria cumple con los más altos estándares, se creó la Marca de Garantía Aceite Farga Milenaria, que registra y certifica que el aceite proviene exclusivamente de olivos milenarios del Territorio Sénia y que cumple con criterios de gran calidad.
Actualmente, dieciséis empresas valencianas y catalanas elaboran aceites bajo esta marca, siguiendo las buenas prácticas del Reglamento aprobado por el Ministerio de Agricultura. Todo el proceso está controlado por técnicos especializados, laboratorios y paneles de cata oficiales reconocidos por el Consejo Oleícola Internacional, y empresas de certificación independientes.
Conócelo con quienes más lo conocen
Una experiencia imprescindible en el territorio
Durante las visitas guiadas a los campos de olivos milenarios, en las almazaras tradicionales donde se elabora el aceite, o en las propuestas gastronómicas de los restaurantes locales, tendrás la oportunidad de descubrir este producto excepcional.
Aprenderás a identificar sus propiedades organolépticas, a distinguir los matices que lo hacen único, a comprender por qué cada botella es un tesoro. Y lo harás de la mano de quienes cuidan los olivos, elaboran el aceite y lo integran en sus platos: los agricultores que mantienen viva la tradición milenaria, los maestros aceiteros que extraen el aceite con mimo y respeto, las familias que han dedicado generaciones enteras a preservar este patrimonio vivo, los cocineros que reivindican su sabor y singularidad.
Son ellos quienes te transmitirán la pasión por estos árboles monumentales y por el aceite que producen. Son ellos quienes te harán entender que el Farga Milenaria no es un producto más, sino el resultado de un compromiso inquebrantable con la calidad, la tradición y el territorio.
Un compromiso de todos con la preservación
El aceite Farga Milenaria eleva el concepto de aceite de oliva virgen extra a una dimensión que va más allá de la calidad gastronómica. Es patrimonio natural embotellado. Es cultura mediterránea en estado líquido. Es el vínculo tangible entre el pasado milenario y el presente que lo honra.
Probar el Farga Milenaria es saborear la historia. Es comprender que hay productos que transcienden el plano físico y se convierten en símbolos de identidad, en guardianes de la memoria, en puentes entre generaciones.
Al descubrir, degustar y adquirir aceite Farga Milenaria, contribuyes activamente a mantener vivo este legado milenario. Cada botella que compras apoya el trabajo de los agricultores que cuidan de estos árboles monumentales, incentiva la conservación de un patrimonio natural único en el mundo y garantiza que las futuras generaciones puedan seguir disfrutando de estos gigantes milenarios y su extraordinario fruto.